Los Raros

Esta serie de retratos fue tomada de noche en el estudio de Buenos Aires en el que viví y trabajé durante más de tres años. Las modelos fueron elegidas entre la comunidad transexual que trabaja en los bosques de Palermo, la zona roja más prestigiosa de la ciudad. Cada sesión de fotos la hice a solas con cada una. Yo deseaba captar a esas personas tal como las veía en los bosques, usando únicamente luz artificial para amplificar su belleza. Se les pagaba un precio fijo por un par de horas en mi estudio en la mitad de su turno nocturno. Luego volvían a trabajar hasta el amanecer, o simplemente regresaban a sus casas.Mi primera noche en Palermo fue afortunada. El taxi daba vueltas alrededor de las calles, había niebla y yo estaba sorprendido de no ver a nadie, cuando de pronto divisamos un grupo de sombras. Las Diosas de Palermo habían formado un gran círculo cerca de un carrito de hamburguesas para discutir temas relacionados con su trabajo y su territorio.Estacionamos el auto, le pedí al chofer que me esperara y me uní a la ronda. En cuanto me vieron ahí parado, escuchando la conversación, una de las chicas me increpó, sacando pecho: ¿Vos qué haces aquí? ¿No ves que son asuntos de mujeres?. Incómodo, contesté que era director de cine de París e intenté comentar un proyecto de película que contaba con la presencia de un travestí, pero otra me interrumpió y exclamó: ¿Director de cine? ¿De París? íQuédate aquí, mi vida!. Y así fui adoptado.