Lucinda Riley narra en La Rosa de medianoche como en el año 2000, Anahita Chavan celebra su centenario rodeada de toda su familia en su residencia india. Es en ese momento, y considerando próxima su muerte, cuando decide que su biznieto Ari debería recibir el manuscrito que años atrás la misma Anahita había redactado contando la verdadera historia de su vida. Ari deberá descubrir todo lo que ocurrió realmente en la mansión aristocrática de Astbury Hall, próxima a Londres, cuando su bisabuela regresó a la India a principios de los años veinte una vez que le anunciaron la muerte de su hijo Moh de tan solo tres años un hecho que Anahita jamás quiso creer.Lucinda Riley recrea su novela entre los escenarios de la India e Inglaterra de principios del siglo veinte en unos ambientes palaciegos y aristocráticos de ensueño. Los exóticos palacios de los grandes marajás con sus hermosas mujeres y sus costumbres, quienes a pesar de todo no dejarían de ser contemplados como inferiores por muchos de sus colonizadores ingleses llenos de prejuicios, atraerán rápidamente la atención del lector. La autora entreteje una historia de ambiciones, misterio, amor y secretos de forma correcta. El lector enseguida se verá atrapado por la vida de Anahita y su sencilla personalidad. El deseo del amor verdadero, de formar una familia sólida basada en el amor mutuo entre los esposos, y la lealtad y la fidelidad en la amistad, serán constantes en la novela. Con la idea de que el bien y el amor al final siempre vencen los personajes principales irán evolucionando en esta dirección.
